Tipos de Alopecia
Hay varios tipos de alopecia, cada uno con factores de riesgo y causas que pueden ser tan diversos como desconocidos, a menudo detectándose solo cuando el problema ya es avanzado. A continuación, te ofrecemos un desglose de los diferentes tipos de alopecia y sus características para ayudarte a identificarlas a tiempo.
Alopecia Androgenética Masculina
La alopecia androgenética masculina, o calvicie de patrón masculino, es una condición frecuente en los hombres que se manifiesta como una pérdida progresiva de cabello en áreas específicas del cuero cabelludo. Esta forma de alopecia es hereditaria y está influenciada por factores genéticos y hormonales.
SU CAUSA PRINCIPAL
La principal causa de la alopecia masculina es la sensibilidad genética a la dihidrotestosterona (DHT), una hormona derivada de la testosterona. La DHT afecta a los folículos pilosos, provocando su miniaturización y transformando el cabello en un vello fino.
Esta condición puede tener un impacto profundo en la autoestima y la imagen personal de quienes la padecen. Aunque no hay una cura definitiva, hoy en día existen tratamientos médicos seguros y efectivos que pueden frenar e incluso revertir la pérdida de cabello.
Alopecia Androgenética Femenino
La alopecia femenina, o calvicie de patrón femenino, es una condición en la que las mujeres sufren una pérdida gradual de cabello, que suele ser difusa y afecta a toda la cabeza, así como un adelgazamiento constante de los cabellos. Esta forma de alopecia es generalmente multifactorial, con causas comunes como factores genéticos y hormonales. Dada su naturaleza compleja, es crucial adoptar un enfoque integral y especializado para su tratamiento.
SU IMPACTO
La alopecia femenina puede afectar profundamente la autoestima y la calidad de vida de las mujeres que la padecen. Los tratamientos disponibles para esta condición pueden incluir medicamentos especializados, terapias con péptidos y factores de crecimiento, láser de baja intensidad, y en algunos casos, trasplante capilar. Además, los suplementos específicos pueden ser recomendados para estimular el crecimiento del cabello.
Alopecia Areata
La alopecia areata es una condición autoinmune de causa desconocida en la que la pérdida de cabello ocurre de forma repentina y en áreas específicas del cuero cabelludo. Los parches de pérdida de cabello pueden variar en tamaño, forma y distribución. Además del cuero cabelludo, la alopecia areata puede afectar también las cejas, pestañas, barba y otras zonas del cuerpo donde crece vello.
TRATAMIENTO
En algunos casos, el cabello puede volver a crecer de forma espontánea en las áreas afectadas, aunque la enfermedad puede presentar ciclos de recurrencia. Para tratar la alopecia areata y estimular el crecimiento del cabello, se disponen de varios tratamientos. Estos pueden incluir corticoides tópicos o infiltrados, medicamentos inmunomoduladores, bioestimulación capilar con microagujas, terapias con luz ultravioleta y otros enfoques médicos.
ALOPECIAS CICATRICIALES
En estos tipos de alopecia, los folículos pilosos se destruyen de manera permanente y son reemplazados por tejido cicatricial. Esta destrucción puede ser provocada por diversos factores, como enfermedades autoinmunes, infecciones, traumatismos o trastornos inflamatorios.
Liquen Plano Pilaris
El liquen plano es una enfermedad inflamatoria que puede afectar la piel, las uñas, la boca y los genitales. En su forma específica conocida como liquen plano pilar, la inflamación se centra en los folículos pilosos, provocando su destrucción y cicatrización. Esta condición suele manifestarse como parches de pérdida de cabello con áreas cicatrizadas en la piel, y puede ir acompañada de picazón o descamación.
DIAGNÓSTICO
Para un diagnóstico preciso del liquen plano pilar, es crucial realizar una tricoscopía y una biopsia confirmatoria. El objetivo del tratamiento es prevenir la progresión de la cicatrización y puede incluir el uso de corticoesteroides tópicos o inyectados, inmunomoduladores tópicos y terapias con luz UV. En algunos casos, se pueden emplear antibióticos o antiinflamatorios sistémicos para controlar la respuesta inmunológica.
Alopecia Frontal Fibrosante
La alopecia frontal fibrosante es una condición que provoca la destrucción permanente de los folículos pilosos, que son reemplazados por tejido cicatricial. Esta forma de alopecia afecta principalmente la zona frontal del cuero cabelludo y las patillas, y puede también involucrar las cejas y las pestañas. Aunque puede presentarse en personas de cualquier género, es más frecuente en mujeres postmenopáusicas.
DIAGNÓSTICO
El diagnóstico de la alopecia frontal fibrosante se realiza mediante una evaluación clínica y tricoscópica, y en algunos casos puede ser necesaria una biopsia para confirmar la presencia de tejido cicatricial. El manejo terapéutico tiene como objetivo detener la progresión de la alopecia e incluye el uso de corticosteroides tópicos, antibióticos, antimaláricos, y en ciertos casos, cirugía de trasplante capilar. Dado que esta condición es relativamente reciente, la investigación sigue en curso, y se están explorando nuevas opciones terapéuticas para su tratamiento.
Foliculitis Decalvante
FOLICULITIS QUELOIDIANA NUCAL Y FOLICULITIS DISECANTE
La alopecia por foliculitis es una condición inflamatoria crónica que causa la
destrucción de los folículos pilosos, resultando en pérdida permanente de cabello. Se
manifiesta a través de lesiones quísticas, pústulas y abscesos en el cuero cabelludo,
que a menudo van acompañados de dolor y picazón. Aunque puede afectar a personas
de cualquier origen étnico, es más común en hombres afrodescendientes y a menudo
está asociada con el síndrome metabólico y enfermedades como obesidad, diabetes,
hipertensión y resistencia a la insulina.
El tratamiento para la alopecia por foliculitis puede incluir antibióticos, isotretinoína,
corticosteroides y, en algunos casos, cirugía.
